Ya vimos la semana pasada la situación de la bolsa española y estos días poco ha variado, el Ibex 35 se sigue moviendo de forma lateral, acercándonos poco a poco a la resistencia que marca el máximo anual (10.700) que tampoco debería ser difícil romper, aunque sí nos sirve como primera referencia a corto plazo; manteniendo un objetivo a largo plazo de 12.200-12.2800 (previa consolidación de los 11.000 que sí pueden costar más); recordar que todo se anularía ante una pérdida (no bastaría puntual) de los 9.850-9.800 puntos que nos situaría en otro entorno. Los resultados empresariales que se están conociendo estos días y la confianza de grandes inversores internacionales hacen pensar que no se producirá este cambio, pero hay que hacer seguimiento y tener activados los stops correspondientes (órdenes que protegen de caídas fuertes de las bolsas).
Algunas bolsas de la Zona Euro que se encuentran en situación parecida a la española: grandes caídas durante los peores momentos de la crisis, de forma indiscriminada y que, a pesar de estar ya alejados de los mínimos de 2012 lo están todavía más de sus máximos históricos.
Entre ellas destacar el EuroStoxx 50 (índice que une las empresas más representativas de los países del Euro) y los más relevantes del mercado italiano (MIB 30), francés (CAC 40) y portugués (PSI 20); que tienen sus resistencias a largo plazo (objetivo de rentabilidad) y los soportes (bajo los que se pueden colocar) en los 3.500/3.000; 24.400/20.550; 4770/4300 y 8.800/6.950 puntos respectivamente.
En cambio el alemán DAX 30 ha seguido una evolución más similar a la de las bolsas americanas: sus mínimos de 2012 estaban un 65% alejados de los marcados en 2009 y ya durante el segundo trimestre de 2013 rompieron y consolidaron sus máximos históricos que databan de 2008; actualmente se encuentra en un lateral entre los 9.000 puntos y los nuevos máximos (9.790) que debería romper para dar nuevas señales de compra.
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